Lamentable
balance el que hace el Partido Popular sobre el recién acabado verano en Isla
Cristina. No hablan de la buena ocupación hotelera -a pesar de la crisis-, del
esfuerzo para mantener todos los servicios que el Ayuntamiento presta al
ciudadano, del amplio programa festivo-cultural llevado a cabo, sin apenas
recursos, tampoco tratan el buen desarrollo de las tres principales fiestas
–Carmen, Punta del Caimán y San Francisco-, solo y exclusivamente un monotema:
la suciedad del pueblo.
Ahora
se entiende los paseos veraniegos en bicicleta del Diputado Provincial y
Portavoz del Partido Popular isleño, Francisco González. No estaba haciendo un
reportaje fotográfico de los atardeceres en la Ría , o de la venta del pescado en la Lonja o del lleno de
nuestras playas, estaba haciendo, a escondidas y con alevosía, lo que entonces
hizo cierto programa televisivo y que todos, partidos políticos, instituciones,
medios de comunicación locales e isleños de toda índole, criticamos
abiertamente, ofrecer la peor imagen, que no la única, de Isla Cristina.
Pero
además, el Partido Popular isleño ha actuado cínica e irresponsablemente porque
ellos, mejor que nadie, saben por qué la localidad no ha estado en los niveles
de limpieza que todos hubiéramos querido –el Equipo de Gobierno incluido-. Esta
razón no es otra que la imposibilidad de contratar a operarios de refuerzo
durante el verano para la limpieza viaria y las playas por la imposición de un
restrictivo Plan de Ajuste que el propio Gobierno del PP les endosó a todos los
Ayuntamientos del país a principios de año que aminora el empleo público.
El
pueblo no ha estado limpio no porque al Equipo de Gobierno le guste verlo sucio
o porque los empleados públicos no hayan dado el máximo, que lo han dado y
mucho más, no ha estado suficientemente limpio porque Isla Cristina, como
siempre, ha triplicado su población y por el contrario el ayuntamiento no ha
podido, o mejor dicho, le han impedido hacer frente a esta situación como en
otros veranos ha hecho, contratando operarios de refuerzo.
De
todas formas, lo denunciado por el Partido Popular, denota una oposición
irresponsable, tremendista y catastrofista, y lo hace solo y exclusivamente con
un objetivo, el de atacar al Equipo de Gobierno, aunque con esta estrategia
política se lleve por delante todo lo positivo que tiene Isla Cristina.